CMI - Conjunto Manto Irrigador

El CMI es la fusión de líneas de goteros y thermofilm, generando un sistema de riego integrado sobre las pilas de lixiviación con características superiores al sistema convencional. Al tratarse de un método integral, el CMI simplifica las tareas de instalación, beneficiando la recuperación de mineral y evitando la pérdida de agua del proceso.

Líneas de Goteros

Tuberías de polietileno virgen de alta densidad (HDPE) potenciado con aditivos que proporcionan protección UV con goteros integrados de flujo turbulento, especialmente diseñados para la lixiviación.

Termofilm

Formulado con 5 capas principalmente de Polietileno Virgen de Baja Densidad (LDPE), de Baja Densidad Lineal (LLDPE) y resinas que otorgan los siguientes beneficios:

Alta Capacidad de Retención Térmica. Disminuye la oscilación de temperaturas en la superficie de la pila aún en condiciones climáticas extremas, aumentando 5 C la temperatura media.
Protección UV. Es resistente a condiciones climáticas adversas. Capaz de resistir hasta 12 meses sin degradarse.
Alta Resistencia al desgaste mecánico. En tracción, punzonado y elongación.
Resistente a diferentes soluciones ácidas de riego

Camisas de Unión

Diseñadas para proteger y mantener la temperatura sobre las tuberías de goteros, disminuyendo el nivel de taponamiento y conservando la linealidad de la instalación y durante todo el ciclo de riego.

Ventajas comparativas CMI

agua

El CMI disminuye en un 90% la evaporación de agua contenida en la solución de riego.

Aumento de 5°C en la superficie de la pila (efecto invernadero potenciado). En biolixiviación incrementa la proliferación de bacterias, recortando la duración de los ciclos. Y acelera la cinética de la lixiviación en pilas de óxidos.

Instalación simultánea e integrada de Mantos y líneas de goteros. Reemplaza el uso de malla de aspersores.

Disminución de un 50% en los riesgos asociados a la exposición de accidentes.

100% de la superficie es cubierta por el CMI y cada línea de goteros permanece en su lugar  regando de manera constante la solución. Evita aposamientos y sulfatación de goteros.

Disminuye los costos de mantención y reparación.